Saltarse el desayuno, comer brócoli y tomar baños de agua
fría: estos son los consejos de un libro de dietas poco ortodoxo y
controvertido que acaba de lanzar un instructor de gimnasio del norte de
Londres, y que ya le ha hecho millonario. Después de la publicación de su libro
bajo el título “Seis semanas a OMG: adelgaza más que todos tus amigos”, el
autor de 39 años de edad, Venice Fulton, ha firmado dos acuerdos de publicación
a ambos lados del Atlántico después de una guerra de ofertas que ha durado
varios días. Fulton ha revelad muy poco acerca de sí mismo, excepto que
escribió el libro en una biblioteca, que está titulado en ciencias del deporte por
la Universidad de Bedfordshire, y que llegó a formular sus teorías después de investigar
varios artículos científicos sobre metabolismo y peso.
Su agente, Richard Pine, asegura en un comunicado que el
acuerdo obtenido con Estados Unidos, Grand Central, tiene un valor de siete
cifras, términos igualmente espectaculares en el Reino Unido. La dieta la
siguen ya celebridades, que no han sido identificadas, evitando los zumos de
frutas, el almidón y los hidratos de carbono. Por otro lado, se debe tomar café
negro y bañarse en agua fría durante 15 minutos por la mañana activando el
metabolismo en lugar de tomar un desayuno.
Con este tratamiento para adelgazar, el autor promete que
los lectores perderán más de 10 kilogramos de grasa en seis semanas. Fulton asegura
que al sumergirse en agua fría “se activará la tasa metabólica para cambiar las
grasas saturadas", y si no eres lo suficientemente valiente como para
sumergir todo el cuerpo, bastará con que expongas las piernas. Y añade:
"La mayoría de nosotros tenemos miedo a las cosas inusuales, y son unos
pocos seres humanos valientes los que aprueban y defienden algo nuevo. Estos
exploradores son los que extienden los descubrimientos y cambian nuestras vidas".
Los zumos de frutas y los batidos causan comida en exceso y los hidratos de
carbono en el brócoli pueden ser peores que en la Coca-Cola.
Mientras que la mayoría de las críticas han sido positivas,
algunos no están convencidos por las técnicas convencionales de Fulton. Él ha
respondido a los críticos en su blog de manera contundente: “nadie debe confiar
en los médicos cuando se trata de la dieta porque son los mecánicos para
arreglar las cosas cuando van mal". Ni corto ni perezoso, el dietista
añade "estoy muy agradecido por el trabajo que hacen, y tengo buenos
recuerdos de los médicos que visitaba cuando era niño. Pero en lo que se
refiere al asesoramiento preventivo, no se puede confiar". Veremos lo que
dura la popularidad de este nuevo régimen.
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